Durante agosto de este año, la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras, comenzó a divulgar, respecto la intención que tenían en avanzar en un proyecto de portabilidad financiera. Un mes más tarde, Mario Farren, superintendente de la SBIF, exponía en diversos medios, que lo que pretendían era implementar un sistema en el cual las instituciones financieras no sólo informarían las deudas de sus clientes, sino que también las condiciones relacionada a estas. Esto incentivaría la competencia, ya que permitiría a un banco mejorar las condiciones crediticias de un cliente de la competencia. No fue sino hasta noviembre que se supo que el gobierno estaba trabajando en un proyecto de portabilidad hipotecaria, proceso en el cual también participamos.
Durante octubre de 2018, estuvimos en el Ministerio de Economía, dando nuestro aporte respecto el proyecto de portabilidad hipotecaria , comentamos la experiencia recogida de tantea.cl respecto al refinanciamiento hipotecario, y sobretodo hablamos respecto la experiencia de portabilidad hipotecaria mexicana, destacando como la modificación legal de ese país logró beneficiar a miles de familias (Portabilidad Hipotecaria en México). También dimos especial énfasis, en que el gran obstáculo para que las personas accedan llevarse su deuda hipotecaria de un banco a otro, era tener que volver a pagar los gastos operacionales, monto que es bastante relevante para la mayoría de las familias chilenas. Por lo tanto, sugerimos que estudiarán con ahinco el mecanismo de subrogación de acreedor, utilizado tanto en España como en México, con el que se lograría disminuir el pago, a un nivel similar al de un mero trámite notarial. Si el camino, para lograr el cambio de legislación relacionado a esta mejora resulta difícil, hemos sugerido que se incluya la alternativa que el gasto operacional se cargue al mismo crédito hipotecario, y que sea el cliente quien decida si desea pagarlo directamente o a través de este mecanismo, tal cual lo hacen algunas pocas instituciones financieras.