Llegan los “Shoppers” inmobiliarios, una tendencia que crece

De pronto se pusieron “de moda” y están cada vez más presentes en diversos aspectos de nuestro vivir. Se trata de los “asesores personales”, que pueden ayudarte a lograr algún cambio significativo en tu conducta o mejorar (y ordenar) tu guardarropa, entre otras cosas.

¿Y por qué no también a buscar la mejor opción para vivir? Aquí aparecen los llamados “shoppers” inmobiliarios, que realizan la búsqueda y encuentran un lugar acorde a tus necesidades para comprar o arrendar, ahorrándote tiempo y esfuerzo. Ellos investigan, visitan los inmuebles, los revisan concienzudamente y luego te informan cuales se ajustan a lo que buscas.

El “shopper”, en una mayoría de casos, es personal. En eso se diferencia de lo que conocemos como agente inmobiliario, aquellos que median entre los vendedores de propiedades y los potenciales compradores. Un (o una) “shopper” trabaja “a medida”, y en vez de recibir una comisión por la venta de la propiedad, éste cobra al cliente.

Existen (al menos) tres perfiles de clientes que están dentro del marco de acción de los “shoppers”: Los extranjeros que llegan al país y buscan a distancia un inmueble donde quedarse, aquellos que se trasladan de una a otra ciudad por motivos laborales y empresas que desean expandirse. En los tres casos, la falta de tiempo obliga a buscar los servicios de alguien que pueda evaluar la oferta local y hacerles llegar la mejor opción.

La figura del “shopper” no está, necesariamente, al alero de una oficina de corretaje de propiedades tradicional, por lo tanto, hay que buscarlos en agencias específicas o en el ámbito independiente. Sus tarifas son variables, aunque hay que tener en cuenta que suelen cobrar el 50 por ciento por adelantado.

Eso, también, depende de la zona en que trabaje y su demanda para oficinas, locales comerciales o viviendas permanentes o estacionarias.

Finalmente, al momento de decidir, es el “shopper” quien se encarga de la negociación y cierre del trato por el inmueble, contando con la ventaja de que conoce del mercado y velando por los intereses de su cliente.

Los “shoppers” ya están en Chile, y poco a poco se hacen un espacio en el terreno inmobiliario. Su influencia y permanencia en el mercado solo el tiempo la dirá.